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La Universidad debe formar para contribuir a transformar la sociedad, según los expertos

«La Universidad no sólo puede formar para responder. La Universidad tiene que formar para contribuir a transformar la sociedad». Ésta fue una de las máximas que se defendieron durante la mesa de debate ‘Ámbitos estratégicos para la cooperación universidad-empresa: innovación, formación y empleo’ organizada por ADEIT en el marco de la celebración de sus 25 años.

José María Peiró: La formación universitaria tiene que «generar valor» para llegar a crear una sociedad más equilibrada, capaz de producir más riqueza, siendo más humana y más justa
En esta línea, el catedrático de Psicología Social y de las Organizaciones de la Universitat de València, José María Peiró, indicó que la formación universitaria tiene que «generar valor» para llegar a crear una sociedad «más equilibrada, capaz de producir más riqueza, siendo más humana y más justa». Peiró estuvo acompañado en la mesa – moderada por el catedrático de Fundamentos de Análisis Económico de la Universitat de València e investigador del Ivie, Javier Quesada– por el catedrático de Análisis Económico de la Universitat de València y director del Ivie, Francisco Pérez, por el director general de Cotec, Juan Mulet, por el director de Adecco en la Comunitat Valenciana, Francisco Martínez, y por el jefe del Departamento de Estudios y Comunicación del CDTI, Pedro Redrado.

La formación como generadora de riqueza
Según explicó el catedrático de Psicología Social, la formación es un elemento fundamental para generar riqueza. «Las estadísticas nos dicen que, en general, la formación produce riqueza y facilita la inserción laboral. Pero también hay que decir que no toda por igual. La formación tiene que ser de calidad y estratégica».

Francisco Pérez: El principal ámbito de generación de valor de la Universidad en su relación con la empresa se produce a través del empleo de los universitarios
En este sentido, remarcó que el reto está en las dos partes, tanto por parte de la empresa como de la Universidad «en saber qué tipo de formación es la más adecuada implementar. No toda la formación tiene la misma rentabilidad».

«Es necesaria una formación que responda y se adecue a las demandas de la empresa. Y ante el gran dinamismo en el mundo de la producción o de las ventas, no hay otra respuesta que formación a lo largo de toda la vida», subrayó Peiró.

La empresa es clave y el emprendedor es un generador de riqueza
Por su parte, el director del Ivie, Francisco Pérez, explicó que el principal ámbito de generación de valor de la Universidad en su relación con la empresa se produce a través del empleo de los universitarios. En este sentido, Pérez precisó que para mejorar las relaciones entre ambos mundos «no sólo hay que preguntarse cuánto tiene que cambiar la formación, sino cómo se puede cambiar el tejido productivo».

«Un tejido productivo con más capacidad de aprovechar el capital humano, facilita la inserción», subrayó. Para ello, Francisco Pérez indicó que «hace falta cambiar la cultura de la Universidad para hacerla más favorable de lo que es. El conjunto de la Universidad tiene que compartir la idea de que la empresa es clave y que el emprendedor es un generador de riqueza al que hay que prestar atención».

Esteban Morcillo: La relación universidad-empresa genera un binomio insoslayable
La mesa inaugural de esta jornada estuvo compuesta por el rector de la Universitat de València, Esteban Morcillo, por el presidente del Consell Social de la Universitat de València y de ADEIT, Carlos Pascual, y por el director general de Industria de la Generalitat Valenciana y del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE), Joaquín Ríos, quienes remarcaron la importancia de la colaboración entre la Universitat de València y su tejido productivo, un binomio «insoslayable», según destacó el rector.

Durante la sesión, la catedrática de Comercialización e Investigación de Mercados de la Universitat de València, Amparo Cervera, presentó el estudio ‘El valor de la cooperación universidad-empresa’. La muestra obtenida refleja que las relaciones universidad-empresa son «relaciones de confianza, compromiso e interactivas entre Universidad y empresas y que les capacitan para la difusión de creatividad, ideas, habilidades, y personas con la meta de crear valor mutuo a lo largo del tiempo», según explicó Cervera.

Entre los aspectos mejor valorados de esta relación, las empresas encuestadas consideraron que el tiempo invertido en su relación con la Universitat de València «había merecido la pena» y que a largo plazo esta relación es «beneficiosa para la empresa».